La literatura, representada en los cuentos, fabulas poemas y en tantas innumerables presentaciones, esas lindas lecturas infantiles abren caminos a la imaginación y la creación es hermoso sentir como este tipo de literatura alimenta nuestro espíritu y nos llena de satisfacción.
Encuentro de círculo de lectura el sábado 20 de noviembre del 2010
Cuento elegido por los niños para compartir comentarios
LOS ARISTOGATOS DE DISNEY
La señera Adelaida Bonfamille era una encantadora dama que vivía en parís. Como era muy rica y no tena hijos, consentía mucho a sus gatos, que habían adquirido costumbres muy finas. Berlioz tacaba el piano, Toulouse pintaba y Marie cantaba. Duquesa, la madre, estaba muy orgullosa de sus gatitos.
Un día la señora bomfamille llamó al notario. “quiero redactar mi testamento”, le dijo. “He decidido que como no tengo familia, salvo los gatos, dejaré a ellos toda mi fortuna. Estoy segura de que mi mayordomo Edgar se alegrará de poder cuidarlos y heredar todo lo que tengo cuando los gatitos ya no vivan”, concluyó. El notario estuvo de acuerdo y, creyendo que se trataba de la mano de la señora Adelaida, besó la cola de Duquesa.
Ninguno de ellos se dio cuenta de que el mayordomo había escuchado toda su conversación.
¡el mayordomo estaba furioso! “He servido fielmente a la señora durante todos estos años, ¡y ahora ella quiere dejar toda su fortuna a los gatos!” exclamo.
Entonces tuvo una idea y un destello de maldad ilumino sus ojos. Esa noche hecho píldoras para dormir en la comida de los gatos. Después de haber senado, Duquesa y los gatitosse quedaron profundamente dormidos. Edgar espero a que la señora se fuera a dormir, luego tomo la sesta donde descansaban los gatos y se dirigió al campo, su intención era abandonarlos lo más lejos posible antes de que despertaran. ¡Así no encontrarían el camino a casa! Pero cuando Edgar se disponía a atravesar el puente, dos perros furiosos lo persiguieron e intentaron morderle las piernas. Edgar quiso huir pero perdió el control de la motocicleta, que se salió del camino. La cesta de los gatos voló por los aires y rodó hasta detenerse en la orilla del río. Edgar no se dio cuenta de que había perdido su preciosa carga.
Afortunadamente, la canasta se detuvo justo antes de caer al rio. “¿Dónde estamos? Porque esta tan oscuro y hace tanto frio?” se preguntaron los gatos. En ese momento comenzó a llover.
Mientras tanto, en parís, el ratón Roquefort ayudaba a la señora Bonfamille a buscar sus gatos, que no aparecían por ninguna parte, ya no había duda alguna: ¡los gatos se habían ido!
Cuando por fin amaneció los gatitos seguían lloriqueando: “¡tenemos hambre!” la pobre Duquesa estaba sin saber qué hacer, cuando apareció un gato callejero. “me llamo O´Malley”, dijo. “¿puedo ayudarlos en algo?” ofreció.
Duquesa, aliviada, la explicó su situación. “yo sé muy bien como llegar a parís” respondió O’Maley.
O’Maley guió al grupo a lo largo de las vías del tren. Pero justo cuando cruzaba un puente, escucharon el poderoso ruido de una locomotora que se acercaba. Los gatos no tuvieron otra alternativa que esconderse debajo de la vía. Tanto ruido hizo el tren, que nadie se dio cuenta de que faltaba uno de los gatitos. Fue Duqueza la que grito desesperada: “¡Marie se ha caído al rio!”
Inmediatamente el valiente O’Maley se zambulló en el agua para salvarla.
“Eres mi héroe” le dijo Duquesa.
El resto del viaje transcurrió sin ningunos problemas. Los gatitos pudieron admirar los arboles, las flores y otros viajeros que encontraron en el camino.
“esas dos señoras tienen pies de goma”, susurró Berlioz a O’Maley en la oreja.
“es porque son aves llamadas gansas”, le contesto riendo entre dientes el gato callejero.
Era ya de noche cuando llegaron a parís.
“tengo una idea dijo O´Malley. “Vivo muy cerca de aquí con mis amigos. ¿Por qué no se quedan con nosotros hasta mañana?” les propuso. “Buscaremos su casa al amanecer”. Duquesa acepto gustosa. Los amigos de O´Malley eran unos excelentes músicos de jazz y la elgante gata y sus gatitos bailaron toda la noche. “que noche tan maravillosa”, dijo Duquesa a O´Malley cuando el baile se hubo acabado. Al día siguiente la gata Duqueza y sus pequeños encontraron su hogar con la ayuda de O´Malley, al tocar el timbre sin que pudieran reaccionar, el mayordomo cogió una y metió a la gata junto con sus gatitos y los amarro con un gran nudo. Pero Roquefort un ratoncito amigo lo vio todo y fue en busca de ayuda en los alrededores de la mansión, por fortuna encontró O´Malley quien de inmediato se puso en marcha para buscarlos pero antes dio indicaciones a roquefort para que le comunicara también a todos sus amigos gatos para que fueran a ayudarlos, ellos cuando supieron que era de parte de O´Malley enseguida se pusieron en marcha. Mientras tanto el mayordomo planeaba cosas horribles en el establo, metiendo a los gatos en un viejo baúl y con burla maliciosa decía harán un largo viaje “¡y la fortuna será toda mía!” en ese momento O´Malley le salto por la espalda. Los amigos de O´Malley a los pocos minutos llegaron y le dieron una gran lección a Edgar y lo metieron en el baúl en el que planeaba mandar los gatos de viaje. Todas las cosas que habían en el establo irían en un trasteo a un largo viaje, que era lo que planeaba Edgar para los gatos y el poderse quedar con todo, pero finalmente el fue el que se fue a hacer ese largo viaje. Mientras tanto la señora Bomfamille lloro lágrimas de alegría al volver a ver sus gatos y pidió a O´Malley que viviera con ellos que ella lo adoptaría, a lo que el gato callejero no se pudo negar ya sentía que Duquesa y sus gatitos eran su nueva familia.
OPINIONES DE LOS PARTICIPANTES
Isabella Ruiz= me gusta mucho la parte en que los gatitos pintan, tocan el piano y Marie canta
Daniela Huertas= me gusta cuando los amigos de O´Malley el gato callejero le dan su lección a ese mayordomo malo.
Harold Huertas= me agrada la parte en que la señora Bomfamille es muy generosa y protege mucho los animales.
Nubia Huertas= es una lectura muy agradable porque hay fantasía, realidad y humor. la realidad a mi modo de ver se ve reflejada porque la señora Bomfamille aprecia y respeta los animales.
Los niños pequeños de párvulos me expresaron en sus rostros que les agrado muchísimo la secuencia de gráficos que habían en el cuento.